El Papa Francisco reafirmó este domingo 30 de septiembre, tras su visita a Luxemburgo y Bélgica, su postura firme en contra del aborto, calificándolo como “homicidio”. En una rueda de prensa, el pontífice señaló que no hay espacio para debate sobre este tema, afirmando que “se mata a un ser humano” y que los médicos que realizan abortos son “sicarios”.

El Papa destacó el derecho de las mujeres a la vida, pero subrayó que este derecho también debe extenderse a los hijos por nacer. En el mismo encuentro, Francisco anunció el inicio del proceso de beatificación del rey Balduino de Bélgica, a quien elogió por no firmar una ley a favor del aborto, calificándolo como un acto de valentía.

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En cuanto al tema del sacerdocio femenino, otro asunto que generó controversia durante su visita a Bélgica, el Papa reafirmó la posición de la Iglesia al respecto. Señaló que “la mujer es más importante que el hombre”, pero criticó el intento de algunas de asumir roles masculinos dentro de la Iglesia. Además, enfatizó que la Iglesia no es una corporación, sino “el pueblo de Dios”, destacando los roles esenciales de las mujeres en su vida y misión.