Los incendios forestales que preocuparon a Quito fueron controlados, al menos hasta la tarde de este viernes, 27 de septiembre de 2024. Sin embargo, los incendios que comenzaron el martes en sectores como Guápulo, Bellavista, barrio Bolaños y el cerro Auqui, afectaron la calidad del aire en la ciudad.

La Secretaría de Ambiente del Municipio informó que la calidad del aire está mejorando de forma gradual, aunque persisten concentraciones peligrosas para personas con enfermedades respiratorias crónicas, debido al ozono troposférico generado por la mezcla de aerosoles y gases vehiculares en el ambiente.

La sequía y los cortes eléctricos no son los únicos problemas del sector agropecuario

Las partículas emitidas durante los incendios pueden causar afectaciones en el sistema respiratorio, especialmente en grupos sensibles. El neumólogo Byron Canelo explicó que estas partículas, si son inhaladas, pueden provocar síntomas como tos, ardor, congestión nasal e incluso broncoconstricción, siendo los más afectados pacientes con condiciones como asma, bronquitis crónica o EPOC.

Ante esta situación, las autoridades municipales recomendaron a las personas con enfermedades crónicas evitar la exposición al aire libre mientras persistan los niveles no saludables.