Dadas las circunstancias actuales se justifica un estado de emergencia cantonal y nacional, sostuvo Rodrigo Rosero, ex secretario de Gestión de Riesgo. “Ambos son necesarios”, remarcó. 

El nuevo marco legal permite destinar todos los recursos y contener este tipo de desastres naturales que golpean a Quito y otras regiones cada cierto tiempo. Por ejemplo, sin este nuevo marco normativo, la Contraloría podría observar que un vehículo del Cuerpo de Bomberos de un cantón equis vaya a Quito o viceversa. 

“El ser humano por naturaleza es reactivo a estos sucesos”. Para Rosero la ciudadanía y los funcionarios deben tomar conciencia porque estas tragedias pueden ser evitadas o mitigadas. 

“Es imposible que cada año nos pase lo mismo: incendios forestales en los mismos sectores; los aluviones en las mismas zonas; que los sismo generen los mismos efectos en los mismos sectores”.