Más de 5.000 devotos se reunieron en la plaza de San Francisco para celebrar la Santa Eucaristía y participar en una solemne procesión eucarística por el Centro Histórico de Quito. La ruta de la procesión, que incluyó una parada en la Basílica del Voto Nacional, fue marcada por la presencia del Cardenal Baltazar Porras, quien brindó una bendición especial.
El recorrido estuvo embellecido con coloridas alfombras de flores, elaboradas por laicos y movimientos apostólicos, que adornaron las calles emblemáticas de la ciudad. Estas alfombras simbolizan la devoción de la comunidad hacia el Santísimo Sacramento, que ocupa un lugar central en la fe católica.
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