La controvertida ministra del Interior, Mónica Palencia, podría ser la próxima funcionaria en enfrentar un juicio político, tras una serie de movimientos dentro de la Asamblea Nacional. La bancada correísta viene de sufrir dos reveses legislativos. El gobierno está desplegando todos sus esfuerzos para evitar que Palencia sea llevada al banquillo.
Durante esta semana, la Comisión de Fiscalización y Control Político ha avanzado en ese propósito. Tras dos intentos fallidos contra la Fiscal General, la bancada correísta ha cambiado de rumbo y ahora tiene en la mira a la ministra Mónica Palencia.
La Comisión de Fiscalización está reorganizando la prelación de los juicios políticos. Ayer, el correísmo rechazó las firmas adicionales presentadas por los legisladores oficialistas y avanzó con el archivo de trámites que interferían en el juicio a la ministra, entre ellos, el juicio contra Sebastián Corral, ex secretario de la Administración Pública. La decisión fue tomada con cinco votos a favor. La proponente, Patricia Núñez, retiró el jueves su solicitud. Incluso Valentina Centeno presentó nuevas firmas para el proceso, pero estas también fueron rechazadas.
Con el mismo objetivo, se retiró la solicitud de juicio contra la exministra de Educación, Andrea Montalvo.
Actualmente, solo queda pendiente el juicio contra el exministro de Economía, Pablo Arosemena, antes de que la ministra Palencia se convierta en el centro del debate. Hoy, sábado, la Comisión de Fiscalización sesionará con un único punto en el orden del día: conocer y calificar la solicitud de juicio político contra Arosemena.
Analistas señalan que ni el retiro de juicios ni la presentación de nuevas firmas están contemplados en la normativa.
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