Gabriel Secaira, consultor en temas energéticos, advirtió que Ecuador podría enfrentar una crisis energética significativa a partir de diciembre de 2024 si no se toman medidas inmediatas para mejorar la infraestructura y asegurar el suministro de energía. Explicó que la falta de recursos para mantenimiento y repotenciación de equipos de generación y transmisión está contribuyendo a los problemas actuales.

A su criterio, la crisis energética podría intensificarse a finales de año. “En diciembre comenzará la crisis energética más fuerte. Para ello, el Gobierno debería haber cubierto al menos 500 megavatios este mes”, afirmó. Además, advirtió que si los equipos anunciados para Salitral, Quevedo y Esmeraldas no llegan a tiempo y si Colombia deja de vender energía a Ecuador, el país podría enfrentar apagones severos.

El regreso de los apagones es una realidad, según experta

El consultor mostró su preocupación por el anuncio del presidente Daniel Noboa de no cobrar las planillas de luz de hasta 180 kilovatios en diciembre, enero y febrero, y la cobertura del pago de un 50% en abril. Según Secaira, esta medida podría resultar en una pérdida de casi 100 millones de dólares en ingresos, fondos que deberían ser destinados a la mejora de la infraestructura energética.

“Esos recursos deberían usarse en el mantenimiento, repotenciación y reemplazo de equipos de generación o transmisión de subestaciones”, enfatizó Secaira.

En relación al apagón del 7 de septiembre de 2024, descartó la posibilidad de sabotaje, señalando que el problema se debe al equipo obsoleto en la subestación Molino, que necesita una inversión de al menos 10 millones de dólares para su reemplazo. “No creo que haya sabotaje. Si el Gobierno habla de eso, debe demostrarlo. Debe darse un resultado porque eso ya se anunció anteriormente”, indicó.