Es tanta la información que nos dan los confiables medios periodísticos tradicionales y tanto o más las ahora invasivas redes sociales, que dan lugar a especular sobre los hechos, esperando la confirmación y/o  consecuencias de lo que se va conociendo.

Algo que llama la atención es el absoluto silencio del Papa Francisco sobre lo que acontece en Venezuela, que es clamorosamente censurado por quienes nos consideramos demócratas; así mismo, extraña la anuencia del Vaticano a matrimonios del mismo sexo, a lo que algunos sacerdotes peruanos se oponen, entre otros hechos; pero en cambio, se alaba el afectuoso encuentro entre el Papa y el Presidente Milei, quien en su campaña electoral despotricó de Francisco; nobleza papal destacada.

Se especula mucho sobre los motivos y/o razones que hacen a Lula, Petro, Amlo, Noriega y algún otro inclinado a lo que ellos llaman izquierda, apoyar al ahora un genocida y delincuente, Maduro. Aumenta lo dicho con la simpatía y presencia en el cometimiento del descarado fraude electoral venezolano de una delegación del partido político que desde fuera de este Ecuador lidera el prófugo ex presidente R. Correa. Es inentendible, y más cuando estamos cerca de una lid electoral donde lo manifestado la mayoría de la opinión pública demócrata de este país rechaza. Igual se especuló sobre los cambios intentados en los partidos y binomios de extrema izquierda, cuando las afines RC5, Reto, Pachakutik y algún otro,  intentaron unirse a fin de captar votos para sus intereses en el Ejecutivo y la Asamblea.

Otro tema de especulación es lo que deberá suceder con el Presidente Noboa y su constitucional obligación de, por la campaña electoral, delegar su cargo a la dama Vicepresidenta con quien están más que distanciados desde antes del primer día en que asumieron tan altas dignidades.

La renuncia de Joe Biden a su candidatura en USA, que impulsó a su actual Vicepresidenta Kamala Harris para que asuma tal desafío, ha hecho que se especule sobre los cambios de ese tan importante evento electoral, en el que contra Donald Trump -de quien se dice, su oreja lo salvó del disparo homicida- luce ella su fuerza femenina igualándolo en algunos Estados, al experimentado Trump. Como no puede ser de otra manera, este evento hace especular a todo el orbe por su incidencia en una de las más poderosas naciones del planeta y sus repercusiones en él.

Dos guerras hacen especular sobre sus razones motivantes. Rusia, al infructuosamente invadir a Ucrania, provocó la solidaridad mundial con el país agedido, especialmente de los paises de la OTAN, convirtiéndose este conflicto en un peligro para la paz mundial, lo que desde septiembre de 2023 aumentó con el vil ataque del terrorista Hamas a Israel, surgiendo un tipo de guerra religiosa, a más de territorial y de otras consideraciones, donde el país agredido, en venganza y afán de liberar a  los numerosos rehenes judíos que Hamas mantiene, ya ha causado casi 50 mil muertos árabes, producto de los bombardeos y fuerte reacción militar judía; lo que está a poco de ampliarse por la intervención de otros paises árabes; diciendose lo mismo -a favor de Israel- por la manifiesta ayuda militar y económica de USA y la OTAN. Impredecible.