Sin gestionar pensamiento estratégico: imposible lograr gobernanza en seguridad

Ago 12, 2024

Por María Fernanda Noboa

¿ Pensar estratégicamente? Es una competencia compleja que permite analizar y diseccionar información de alto valor para identificar y anticipar la existencia de oportunidades y desafíos para una toma de decisiones oportuna y adecuada, clave para la planificación en diversos niveles de la conducción del Estado. En el caso concreto de nuestro país comprender sistémicamente los factores y dinámicas detonantes de la aguda crisis de inseguridad y violencia frente a la cual es indispensable direccionar rutas de acción efectivas, para afrontar lo urgente sin dejar de lado la mirada de largo plazo.

Pensar estratégicamente implica adaptar la percepción y el sentido de confusión que provocan en los tomadores de decisión contextos azarosos, cambiantes, poco predecibles, inciertos; toda vez que el desconcierto no está focalizado en los entornos sino en la limitación de los actores frente a situaciones complejas, vacías de referentes conocidos, es decir a la impotencia que produce no contar con nuevos modelos de comprensión de la realidad. Dicha realidad inédita, es como un campo minado listo para explotar en cualquier nivel y escala espacio-tiempo, para lo que hay que estar preparado.

Así, frente a la red de los mercados criminales, las lógicas de interacción entre los diversos actores criminales, y su asentamiento en una inestabilidad dinámica, con diversas poblaciones, grupos de la sociedad civil, jóvenes, autoridades seccionales, es preciso replantearse varias acciones en los territorios de intervención:

  • El desarrollo de autorreflexión flexible respecto de los paradigmas y herramientas conceptuales con las que se hace el acercamiento a la realidad para incorporar nuevas formas de develarla y comprenderla en toda su magnitud. Esto implica una correlación permanente entre pasado, presente y futuro deseado y la construcción de dispositivos discursivos coherentes con dichas interpretaciones que den legitimidad a cualquier decisión. Igualmente, con esta escala de P-P-F coexisten ciclos paralelos que pueden ir modificando lo que se considera como seguro e interrumpir con situaciones emergentes lo que se había previsto; para ello la anticipación estratégica es vital;
  • La capacidad de mantener el tono emocional adecuado para no cometer errores producto de la desesperación por mostrar resultados de intervenciones específicas en seguridad. Esto implica mantenerse vigilante y receptivo ante los cambios, buscando la innovación en las respuestas, haciendo un cálculo inteligente de las capacidades y recursos estatales (logísticos y discursivos) frente a la activación de las amenazas a la seguridad y criticidad de los factores de riesgo, lo que en otras palabras tiene que ver con una vigilancia prospectiva constante, para marcar líneas sostenibles y no solo de impacto y poca recordación en el tiempo.
  • Finalmente, operaciones ventajosas de información y contrainformación, construyendo inteligentemente desde la estadística bien situada y su complementariedad con argumentos cualitativos expertos en seguridad un panorama que lidie con heterogeneidad de actores (ciudadanos, voceros, activistas, grupos de presión, de oposición) su entramado de interdependencias y la potencial multiplicación de cambios.


0 comentarios



Te puede interesar

El mundo según el gobierno

El mundo según el gobierno

Lo que dijo la jueza Vera fue espeluznante. Dijo que un correísta convertido en presidente del Consejo de la...


Suscríbete a nuestro boletín



Lo último