Para acabar con la minería ilegal en Ecuador, es necesario seguir la ruta del dinero, del mercurio y de la maquinaria, además de implementar un proceso para depurar las instituciones. Estas son acciones urgentes que, en opinión de María Eulalia Silva, presidenta de la Cámara de Minería de Ecuador (CME), se debe adoptar con urgencia.

…“Esta actividad ilícita no se puede hacer sin la complicidad de las autoridades, especialmente las locales”, advirtió la ejecutiva de la CME en el espacio de entrevistas de Teleamazonas, la mañana de este martes 6 de agosto de 2024.

En ese sentido, Silva calificó como positiva la decisión del Viceministerio de Minería de destituir a varios directores encargados de emitir certificados de exportación de oro; sin embargo, consideró que esas acciones deben estar acompañadas de medidas para regularizar a todos los operadores, a fin de que cumplan la normativa vigente.

Para complementar esas medidas, Silva instó a coordinar acciones con las autoridades judiciales para que las denuncias sobre operaciones de minería ilegal terminen en sentencias ejecutoriadas y no sean archivadas.

La titular de la CME fue enfática al advertir que la minería ilegal está devastando el patrimonio natural de Ecuador y robando sus valiosos recursos geológicos, algo que, para ella, ha sorprendido a los ecuatorianos y a la región, debido a la falta de mecanismos de control efectivos para combatir la extracción ilegal.

“Estas medidas deben implementarse completamente, con las nuevas autoridades operando desde Quito,” y destacó la necesidad de promover una reforma a la Ley de Minería para garantizar que los recursos que genera la industria sean invertidos en obras de desarrollo en las comunidades, evitando que sigan yendo a la caja chica de los gobiernos locales.

Silva destacó que la minería responsable es una herramienta crucial para combatir la ilegalidad e indicó que, en Ecuador, menos del 7% del territorio nacional concesionado y menos del 10% ha sido explorado; es decir que tiene el potencial suficiente para convertirse en una potencia minera mundial, que vaya de la mano con el nuevo modelo energético global.