“Inventos, delirios y ataques absurdos. Para lo que ha quedado: para llamar la atención desesperadamente. Háganle un favor y cámbienle la contraseña del Wifi para que deje de hacer el ridículo”.

Con este mensaje, posteado a través de su cuenta de X, el presidente de la Asamblea Nacional, Henry Kronfle, hizo frente a la insinuación hecha por el expresidente Rafael Correa, quien insinuó, sin mostrar ninguna prueba, que el titular del Legislativo sería el responsable de la filtración de información reservada sobre el embarazo de la fiscal general del Estado Diana Salazar.

En X, Correa publicó este mensaje: “Conociendo su pequeñez humana, seguramente él fue el autor de la terrible «filtración»: que volvieron a suspender el juicio político de #LadyImpericias argumentando esta vez «placenta previa».”

La polémica estalló este martes, luego de que Kronfle, en una entrevista en el portal Visionarias, confirmara la filtración de dicha información e indicara que Gissela Garzón, asambleísta del movimiento correísta Revolución Ciudadana (RC5), quien es la impulsadora del juicio político contra Salazar que fue suspendido por su embarazo, solicitaba con insistencia información detallada sobre el estado de salud de la fiscal general.

El titular de la Asamblea explicó que, a una sesión reservada del Consejo de Administración Legislativa (CAL), realizada el pasado 10 de julio de 2024, asistió en calidad de invitada la legisladora Garzón, para que conozca la información requerida. Antes de esa reunión, Henry Kronfle puntualizó que ella y los demás miembros de esa instancia parlamentaria, firmaron un acuerdo de confidencialidad, es decir que asumieron su compromiso de mantenerla bajo sigilo.

Kronfle precisó además que, la fiscal Salazar, a quien calificó como una dama y cuyo trabajo destacó, incluso antes de esa sesión del CAL y por iniciativa propia remitió a la Asamblea el certificado médico avalado por el IESS con información actualizada sobre su estado.

Sin embargo, un día después, Rafael Correa difundió detalles de dicho certificado, a través de su cuenta de X, lo que provocó la reacción inmediata de Diana Salazar: “Mi vida privada, la vida que crece dentro de mí, la privacidad de mi familia y nuestra seguridad no son cuestiones que le atañan a nadie más que a nosotros como familia”, dijo en un comunicado y advirtió que iniciará las investigaciones que correspondan para dar con el responsable de esta filtración a la que calificó como un delito.

Kronfle, de manera frontal, en la misma entrevista dijo: “No podría decir con exactitud ni acusar a alguien por la filtración de la información, pero confío plenamente en los miembros del CAL, con quienes trabajo desde hace ocho meses”.

Con estas declaraciones, el presidente de la Asamblea no solo desmiente las acusaciones del exmandatario, sino que también pone en el ojo del huracán a quienes buscan utilizar esa información personal y sensible con fines políticos.