El parque termoeléctrico de Ecuador enfrenta una grave crisis debido a la antigüedad y obsolescencia de sus equipos, algunos tienen entre 40 y 50 años de operación, y resulta más costoso repararlos que adquirir nuevos, advierte Gabriel Secaira, consultor en temas energéticos.
El experto criticó la falta de acción de los últimos gobiernos desde 2019 para garantizar nueva generación eléctrica, lo que ha exacerbado la crisis actual. Recordó que, desde el año pasado, el Operador Nacional de Electricidad (Cenace) advirtió sobre la crisis que afectará al para desde fines de 2023 y principios de 2024.
Esta situación ha sido exacerbada por la falta de instalación de nuevas fuentes de generación eléctrica desde 2019, a pesar de las advertencias del Operador Nacional de Electricidad (Cenace) sobre la inminente crisis.
En una entrevista para 24 Horas en Teleamazonas, el lunes 22 de julio de 2024, Secaira criticó al Gobierno de Guillermo Lasso por no haber contratado nuevas fuentes de energía y al de Daniel Noboa por no haber tomado acciones en sus primeros siete meses de gestión.
El Cenace estima que se necesitarán 475 megavatios para superar el estiaje de este año y una cantidad similar para el próximo, planteando la compra de energía a Colombia. Sin embargo, Secaira advierte que Colombia también enfrenta problemas con sus embalses y no podrá abastecer a Ecuador con los 400 megavatios necesarios.
El plan maestro de Ecuador preveía la instalación de 1,230 megavatios para este año y 1,550 megavatios adicionales para el próximo, objetivos que no se han cumplido. Ante esta situación, Antonio Goncalves, ministro de Energía, anunció el alquiler de una barcaza con capacidad de 110 megavatios por USD 115 millones para operar durante 18 meses y enfrentar el estiaje.
Secaira considera esta medida como una solución inmediata, aunque reconoce que es resultado de la falta de inversión y el incumplimiento del plan maestro, y no descarta la posibilidad de futuros apagones en el país.
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“La barcaza tendría un costo de 115 millones de dólares y estaría operativa durante 18 meses. Podría ayudar a superar en algo la crisis del estiaje que empezará en septiembre de este año y la del próximo año también”, concluyó.
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