Controlar los niveles de glucosa en sangre es esencial, especialmente para quienes padecen diabetes o prediabetes. Recientes investigaciones están explorando métodos naturales para estabilizar estos niveles, y entre ellos, las semillas de chía han ganado atención.

Las semillas de chía se destacan por sus beneficios en la regulación de la glucosa, según la nutricionista Kayla Kopp de la Clínica Cleveland. Estas semillas están cargadas de nutrientes y ofrecen múltiples ventajas para la salud:

• Mejoran la digestión: La fibra en las semillas de chía favorece la absorción de nutrientes y el crecimiento de bacterias intestinales beneficiosas, aliviando el estreñimiento.
• Aportan a la pérdida de peso: Su capacidad de expandirse en el estómago puede reducir el apetito, aunque es importante no abusar para evitar problemas digestivos.
• Previenen enfermedades crónicas: Estudios sugieren que las semillas de chía pueden ayudar a evitar enfermedades cardíacas, diabetes y obesidad, además de reducir la inflamación y controlar los niveles de glucosa y triglicéridos.

Gracias a su alto contenido de fibra, las semillas de chía pueden mejorar la resistencia a la insulina y regular los niveles de azúcar en sangre, disminuyendo el riesgo de diabetes tipo 2. Además, el consumo de pan con semillas de chía puede tener un impacto positivo en la regulación de glucosa comparado con el pan tradicional.

Sugerencias para incluir semillas de chía en tu dieta:

• Mezclar con yogur, avena o batidos.
• Usarlas como sustituto de huevos en sopas, guisos y salsas.
• Preparar un budín de chía combinándolas con leche y edulcorante, y refrigerar durante la noche.
• Incorporarlas en productos horneados como muffins y panqueques.
• Agregar a aderezos para ensaladas y salsas.

Las semillas de chía se están convirtiendo en un componente esencial para quienes buscan una dieta saludable y equilibrada.