Marcelo Espinel, subdirector de la Fundación Ciudadanía y Desarrollo, abordó la creciente tensión entre el Ejecutivo y el Legislativo en Ecuador, describiéndola como “la telenovela diaria que hace daño a todos y cada uno de los ecuatorianos”.

En entrevista con Notimundo, Espinel criticó duramente a ambos poderes del Estado por no centrarse en las necesidades de la población.

“No vemos una Asamblea Nacional que esté enfocada en satisfacer las necesidades de los ecuatorianos, en dar respuesta a los problemas que tenemos en cada uno de nuestros días, y esto es lamentable”, señaló Espinel, enfatizando que la disputa afecta negativamente la imagen de la institucionalidad democrática del país.

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La entrevista también abordó la falta de un sistema democrático fuerte y estable en Ecuador, destacando la práctica conocida como “camisetazo”, donde los asambleístas cambian de partido político según sus intereses.

“Esto produce mayorías móviles dentro de la Asamblea Nacional…claramente hay otros intereses influyendo en el accionar legislativo”, explicó Espinel.

Sobre las recientes declaraciones de Esteban Torres, viceministro de Gobierno, sobre la radicalización de la pugna entre el Gobierno y el Legislativo. Espinel respondió que, aunque la Asamblea Nacional es una arena política y tiene derecho a fiscalizar, también hay manipulaciones por parte del Ejecutivo.

“De lado y lado utilizan las herramientas que da la norma…para retrasar un posible enjuiciamiento político a la canciller o para adelantar el enjuiciamiento político de la canciller”.

En cuanto a las acusaciones del presidente de la Asamblea Nacional, Henry Kronfle, sobre presiones y “bullying político” desde el Ejecutivo, Espinel subrayó la necesidad de transparencia. “Si esto está sucediendo, tiene que transparentarse, denunciarse y decirse quiénes son aquellos que están ofreciendo o exigiendo algo a cambio de votos dentro del parlamento”.

Espinel también criticó a la asambleísta Valentina Centeno, destacando su baja presencia en votaciones, lo que considera un reflejo del populismo electoral prevalente. “El oficialismo prefiere estar ante los medios de comunicación dando discursos en lugar de trabajando por el bien del país”, afirmó Espinel, señalando que este comportamiento está dirigido a ganar protagonismo de cara a las elecciones de 2025.

Finalmente, Espinel advirtió que mientras la agenda de los legisladores siga siendo electoral en lugar de enfocarse en proyectos de ley cruciales para el país, como el Código de la Niñez y el Código de la Salud, será difícil alcanzar consensos. “Lo único que al parecer le interesan a ciertos grupos dentro de la Asamblea Nacional es poder ganar la siguiente elección y no dar respuesta a proyectos de ley que son urgentes y necesarias para el país”.