En un reciente anuncio, el gobierno ha confirmado la eliminación progresiva de los subsidios a las gasolinas Eco y Extra, una medida que busca aliviar la carga fiscal del Estado. Para mitigar el impacto económico en los sectores más vulnerables, se ha implementado un programa de compensación dirigido a los propietarios de taxis, mototaxis y servicios mixtos rurales, basado en su consumo mensual promedio de combustible.

Según el anuncio oficial, el diferencial de precios establecido es de 26 centavos por litro, lo que se traduce en una compensación de aproximadamente 40 dólares mensuales para cada conductor. Este apoyo financiero tiene como objetivo amortiguar el impacto del aumento de precios en los ingresos de los conductores que dependen del uso intensivo de combustibles.

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Hasta el 24 de junio, fecha del primer corte, un total de 12,000 conductores se han registrado en la plataforma del Ministerio de Transporte, y están programados para recibir la primera transferencia correspondiente al primer mes directamente en sus cuentas bancarias. Sin embargo, alrededor de 4,000 conductores aún no han completado el proceso de inscripción de sus cuentas bancarias, lo cual podría retrasar el pago de la compensación.

El gobierno ha asegurado que los conductores que aún no se han inscrito tendrán algunos meses adicionales para completar el proceso y que recibirán la compensación de forma retroactiva una vez que sus datos sean verificados y procesados.

Por ahora, la eliminación de subsidios afecta únicamente a las gasolinas Eco y Extra. El gobierno ha indicado que se planifica extender esta medida al diésel en el futuro, aunque no se ha establecido una fecha concreta para esta segunda fase del plan. Esta estrategia forma parte de un esfuerzo más amplio para racionalizar los gastos públicos y reorientar los recursos hacia áreas críticas de desarrollo y bienestar social.