El Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (Cpccs) inició el proceso para seleccionar dos vocales del Consejo de la Judicatura (CJ) y también enfrentará el reto de escoger a los integrantes del Consejo Nacional Electoral (CNE).

Este marte, la vicepresidenta del Cpccs, Mishelle Calvache, explicó que la selección de los vocales de la Judicatura se activó tras la renuncia de Wilman Terán a la Presidencia del organismo el 20 de diciembre pasado, y la posterior asunción de Álvaro Román como presidente. Aunque la sentencia 1219-22-EP impedía la activación directa del mecanismo, se emitieron dos exhortos y finalmente, la Dirección General del CJ remitió la activación del mecanismo la semana pasada. Por esta razón, el Cpccs solicitó a la Asamblea Nacional y a la Corte Nacional de Justicia que envíen las ternas.

El proceso de selección durará un mes y medio. En este contexto, Román podría postularse, pero tendría que renunciar a su cargo actual de presidente suplente del CJ.

En cuanto a la elección de los cinco vocales del CNE, Calvache indicó que la Comisión Ciudadana, constituida desde noviembre de 2022, no actuó con transparencia.

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Señaló que se introdujo documentación fuera de tiempo, se subieron puntos sin justificación y hubo un posible robo de claves para beneficiar a ciertos postulantes. Por ello, el Cpccs elaboró un informe jurídico recomendando la remoción de ciertos comisionados, lo cual está en revisión tras haber recibido a los comisionados en audiencia pública.

Calvache considera necesario nombrar una nueva comisión debido a la activación de mecanismos judiciales para acceder a la información pública.

Propone que, a partir del banco de suplentes elegibles, se realice un sorteo público para nombrar a los nuevos comisionados. La situación actual plantea la interrogante sobre el futuro de los 167 candidatos que ya alcanzaron la fase de calificación de méritos para consejeros electorales.

Una vez obtenida la viabilidad de la Procuraduría General del Estado, se deberá realizar una recodificación para asegurar que no se afecten las puntuaciones de los postulantes. Esta cuestión se debatirá en el Pleno del Cpccs para explorar las alternativas jurídicas y unificar el proceso lo antes posible.

La intención es que los dos concursos se realicen de manera paralela, pero se unifiquen en uno solo para ahorrar tiempo y recursos, minimizando así el impacto en los candidatos que han avanzado en el proceso.