Diego Chimbo, abogado defensor de Pablo Muentes, ha refutado las declaraciones de la testigo protegida Mayra Salazar, calificando sus afirmaciones de falsas y contradictorias. Chimbo enfatizó que durante los 60 días de instrucción fiscal, su defendido ha optado por mantener silencio mientras recopila información para refutar las acusaciones presentadas por la Fiscalía.

Según Chimbo, existen discrepancias entre las afirmaciones de Salazar y los testimonios de otros procesados mencionados. Por ejemplo, mientras Salazar señalaba que Muentes recibía a vocales de la Judicatura en su casa, Xavier Muñoz, uno de los supuestos visitantes, declaró no conocer al exasambleísta en absoluto.

El abogado también señaló que las declaraciones de otras figuras, como la exdirectora provincial de la Judicatura, María Josefa Coronel, y Carolina Jaume, desmienten los testimonios de Salazar sobre presuntas peleas o influencias de Muentes en decisiones judiciales.

Chimbo destacó que muchos jueces provinciales han declarado no conocer a Muentes, lo que pone en duda las acusaciones de influencia indebida en sentencias judiciales.

Además de cuestionar la credibilidad de Salazar, Chimbo denunció la arbitrariedad del Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad (Snai) por trasladar a su cliente, Muentes, de manera irregular entre diferentes centros penitenciarios. Este traslado ha dificultado la comunicación entre abogado y cliente, complicando la defensa legal.

El abogado reiteró la importancia de basar las acusaciones en pruebas documentales sólidas y no solo en testimonios controvertidos. Chimbo concluyó resaltando que las alegaciones de Mayra Salazar no pueden sustituir evidencias concretas en un proceso penal justo y transparente.