En una tarde de terror, Sidney se vio sacudida por un brutal ataque en un concurrido centro comercial que dejó un saldo de seis personas fallecidas y múltiples heridos. Según informes de la Policía australiana, el incidente comenzó alrededor de las 16:00 horas locales, cuando un individuo armado con un cuchillo ingresó al establecimiento y comenzó a atacar a transeúntes y clientes.

La rápida acción policial culminó con la neutralización del agresor, quien fue abatido a tiros en el lugar. Anthony Cooke, comisionado adjunto de la Policía, confirmó que el sospechoso actuó solo, aunque aún se investigan los motivos detrás de este acto de violencia. Las autoridades no descartan la posibilidad de que se trate de un ataque terrorista y continúan con las indagaciones pertinentes.

El Consejo de Waverley, distrito donde se encuentra ubicado el centro comercial Westfield Bondi Junction, instó a la población a evitar la zona mientras los servicios de emergencia atendían la situación. Según el servicio de Ambulancias de Nueva Gales del Sur, al menos siete personas resultaron apuñaladas en el incidente, incluido un bebé de nueve meses, quienes fueron trasladados de inmediato a los hospitales cercanos para recibir atención médica.

El caos se apoderó del lugar, con cientos de personas siendo evacuadas del centro comercial en medio de la confusión y el temor. Las redes sociales se inundaron con imágenes de la escena, mostrando a los transeúntes abandonando el área mientras llegaban policías y ambulancias para brindar asistencia.