Para el periodista de investigación, Arturo Torres, el crimen organizado, el narcotráfico y todas sus organizaciones conexas han tratado en los últimos tiempos de tener un control de los medios de comunicación de Ecuador, aprovechando la proliferación de sitios web que ni siquiera están debidamente registrados.

Dice que muchos periodistas han emprendido, valiéndose de la transición hacia lo digital, lo que ha llevado a que el ejercicio periodístico se mezcle con el manejo administrativo. Y es que muchos profesionales de la comunicación, en su búsqueda de mantener financieramente medios independientes, se han visto obligados a asumir roles de ejecutivos y gerentes, alejando así su atención del verdadero propósito del periodismo: informar con ética y veracidad.

Torres advirtió sobre el peligro de convertirse en “tontos útiles” para las mafias, aceptando financiamiento que compromete la integridad y la independencia de los medios.

Insistió en que el periodismo debe mantener una relación respetuosa pero distante con sus fuentes, evitando compromisos que socaven su capacidad para servir al interés público y a la democracia.