En un giro impactante, la policía australiana descubrió los cuerpos de la pareja conformada por el exreportero de televisión Jesse Baird, de 26 años, y su compañero, el asistente de vuelo Luke Davies, de 29. El sospechoso, el oficial de policía Beau Lamarre-Condon, quien previamente se negó a cooperar, proporcionó información clave que llevó al hallazgo de los cuerpos.

Los restos fueron encontrados ocultos bajo rocas y escombros en una propiedad rural cerca de Bungonia, a 200 kilómetros al suroeste de Sydney. Estaban dentro de las mismas bolsas de tablas de surf que, según la policía, Lamarre-Condon utilizó para transportar los cuerpos desde la residencia de Baird.

El superintendente detective Daniel Doherty de la Fuerza de Policía de Nueva Gales del Sur informó que el avance en el caso se produjo cuando el sospechoso colaboró con los detectives el martes, indicando el lugar exacto donde se encontraban los cuerpos.

El arresto de Lamarre-Condon se produjo el viernes, y desde entonces enfrenta acusaciones de asesinato. La policía sostiene que el sospechoso arrojó inicialmente los cuerpos en la propiedad que fue registrada por los agentes, pero regresó solo al día siguiente para trasladarlos nuevamente.

La sargento detective Sasha Pinazza, a cargo de la investigación, expresó su alivio por el hallazgo y la conclusión de una búsqueda que demandó un arduo esfuerzo. “Estoy exhausta. Anoche volvimos a casa muy desinflados, pero no está en nuestra naturaleza rendirnos”, comentó Pinazza.

La policía está revisando los procedimientos de manejo de armas que permitieron a Lamarre-Condon utilizar su pistola reglamentaria en el presunto crimen mientras estaba fuera de servicio. La comisionada de policía Karen Webb aseguró que se buscarán formas de mitigar cualquier riesgo similar en el futuro.

La acusación de que un oficial de policía cometió un asesinato ha conmocionado a la nación, llevando a los organizadores del Mardi Gras de Gays y Lesbianas de Sydney a solicitar a la policía que no participe en el desfile anual este fin de semana. La decisión de excluir a la policía del desfile fue respaldada por la junta del Mardi Gras, considerando el impacto emocional en la comunidad LGBTQIA+.

La investigación sigue en curso, y la policía continúa comprometida con la verdad y la justicia en este caso. Se espera que se tomen medidas adicionales a medida que se esclarezcan los detalles del crimen.

La comunidad australiana se encuentra en duelo por la pérdida de Baird y Davies, y las autoridades trabajarán para brindar apoyo a sus familiares y amigos en estos momentos difíciles.