En medio del escalofriante hallazgo del cuerpo de Dana Ramos, la niña de 8 años que fue encontrada sin vida en la cisterna de la casa de sus abuelos, continúan surgiendo detalles perturbadores del crimen que ha conmocionado a la ciudad de Riobamba, ubicada a 216 kilómetros al sur de Quito.

Las investigaciones revelan que la motivación detrás del secuestro de la pequeña estaría vinculada a obtener el dinero de una póliza de seguros perteneciente a la madre de Dana. Jorge Peñafiel, legislador por Construye, informó en NotiMundo Estelar que el padre de la niña, un sargento de la Policía, actualmente en prisión, es señalado como el principal sospechoso.

La Fiscalía ha indicado que una prima de la niña, también detenida, relató que el padre de Dana planificó el secuestro para hacer frente a deudas, conocedor de la existencia de la póliza de seguro de la madre. La sospechosa reveló que, el 1 de febrero, recibió instrucciones del padre para llevar a cabo el secuestro, distraer a la familia y responder mensajes desde el teléfono de la niña.

Los primeros indicios sugieren que Dana recibió un mensaje a través de un juego en línea, indicándole que su madre la enviaba a la tienda. Sin embargo, la madre leyó el mensaje 10 minutos después, pero Dana ya no estaba en la tienda, según informó Teleamazonas. Un vecino afirmó haber visto a la niña parada en la puerta de su casa.

La búsqueda de Dana se prolongó durante 15 días, marcada por mensajes extorsivos a la familia que exigían miles de dólares para su liberación. Las autoridades determinaron que estos mensajes se enviaron desde dispositivos vinculados al padre y la prima de la niña.

El padre, detenido el 9 de febrero, es un sargento de la Policía con funciones investigativas. La prima, detenida el 8 de febrero, permanece bajo arresto domiciliario por estar embarazada.

El 16 de febrero, el macabro descubrimiento del cuerpo de Dana en la cisterna ocurrió después de que el persistente ladrido de un perro alertara a familiares y autoridades. La casa ya había sido allanada en los primeros días de la desaparición, pero el cuerpo de la niña no fue descubierto hasta más tarde.

Las autoridades sospechan de la posible participación de más personas en este delito y aguardan conocer los detalles completos de la necropsia. Los informes preliminares indican que Dana falleció por asfixia y fue arrojada a la cisterna, estimando su muerte alrededor del 9 de febrero, el mismo día de la detención del padre.