El gobierno ecuatoriano está considerando un ajuste en los precios de la gasolina Eco y Extra como medida para reducir significativamente los elevados montos destinados a subsidios. Se plantea un enfoque gradual, implementando un sistema de bandas similar al que ya rige para la gasolina Súper, con la posible aplicación de esta medida a mediados del presente año.
Según el viceministro de Finanzas, Daniel Falconí, la implementación del sistema de bandas se percibe como una estrategia eficaz, ya que contribuiría a evitar la volatilidad en los precios, alineándolos con las fluctuaciones del mercado internacional. Además, el sistema proporcionaría un control más preciso sobre la variación de la inflación, estableciendo límites máximos para los cambios en los precios de los combustibles. Falconí destaca que esta medida permitiría a los contribuyentes y a la población en general una mejor planificación a futuro.
Es importante señalar que el sistema de bandas de precios no es una novedad en Ecuador. Fue implementado por el gobierno de Lenín Moreno en 2019, pero enfrentó resistencia y protestas de grupos indígenas y organizaciones sociales. La metodología incluía un ajuste mensual del 3% en los precios del diésel, gasolina Extra y Eco para el sector automotor, con el objetivo de alcanzar niveles internacionales.
Este sistema se mantuvo hasta junio de 2022, cuando un paro nacional resultó en la suspensión de la medida. Desde entonces, los precios de la gasolina Extra y Eco se congelaron en 2,40 dólares por galón, mientras que el diésel se mantuvo en 1,75 dólares, cifras que persisten hasta la fecha.
La propuesta actual busca encontrar un equilibrio entre la estabilidad económica y la mitigación de los impactos en la población, considerando la experiencia previa y buscando soluciones que minimicen las posibles tensiones sociales.
0 comentarios