El asunto es sencillo: Si Barcelona Sporting Club no tiene un directorio inscrito en el Ministerio del Deporte en los próximos días, le caerán sanciones. Y una de ellas puede ser el descenso.

Ante ese escenario, Antonio Álvarez utilizó las redes sociales para presionar al titular de esa cartera de Estado, Andrés Guschmer.

Él busca que se habilite a la lista que dirige, a pesar de que el Ministerio identificó algunas irregularidades en el proceso. Se refugia en una sentencia de una jueza constitucional.

“Hasta hoy he mantenido un notable silencio sobre el tema de la inscripción de mi directiva”, inicia Álvarez en X.

Y dirige su comentario: “Sin embargo, ante la falta de acción y la escasa atención por parte del MINISTRO del Deporte, es necesario abordarlo de manera transparente y sobretodo frontal. Estamos al borde de enfrentar el peor daño institucional que Barcelona Sporting Club haya experimentado”.

Según él, “negarse a inscribir al club a pesar de contar con una orden judicial va en contra de la ley, es muy grave”.

Y le deja un recado: “si desea apelar, hágalo, pero no perjudique a nuestro club”.

Álvarez recriminó que hace varios días ya expuso el problema de manera personal y añadió que no lleve el asunto al plano personal.

“Si desea seguir hablando en los medios, hablando de mi familia, insinuando bajezas y utilizando al club para destacar su gestión, hágalo, pero NO perjudique a Barcelona, en su despacho cuando nos reunimos el 21 de diciembre, le enseñé los mensajes y le expliqué muy bien con punto y coma todos los problemas que Barcelona estaba YA para ese entonces enfrentando, problemas terribles, que eran difícil de solucionar sin su inscripción, incluso de perder jugadores claves para mantener la estructura sólida del equipo, de una gestión bancaria que estaba pre aprobada y su no inscripción ocasionaba que todo se caiga, todo se lo enseñé y se lo sustenté con pruebas. Con 10 testigos presentes aproximadamente”.

Y volvió a refugiarse en el amparo conseguido. “Frente a una clara disposición de las autoridades para proceder con la inscripción y la negativa absoluta del Ministro, es evidente su intención de contravenir la ley. Si tiene problemas con la directiva, con el Tribunal Electoral de BSC o incluso con los socios, resuélvalos, pero no perjudique a Barcelona”, insistió.

Con respecto al proceso judicial, anticipó que “se ha incumplido con la sentencia enviada por una jueza constitucional, quien además dictaminó que el directorio de BSC del período 2023-2027 debe ser inscrito de inmediato en el Ministerio del Deporte”.

“En marzo, durante la Asamblea del club, entre los socios de Barcelona, resolveremos este asunto como debe ser, entre barcelonistas. Ya se convocó la asamblea y en los puntos del orden del día se resolverá, ¿qué más quiere?”.