Una noche que debería haber sido de diversión y música se convirtió en tragedia en la sala de conciertos Crocus City Hall, ubicada en Krasnogorsk, a las afueras de Moscú, Rusia. Según informes preliminares, una explosión seguida de un tiroteo dejó un saldo devastador: al menos 40 muertos y más de 100 heridos, con al menos 20 personas hospitalizadas, cuatro de ellas en estado grave.
Videos compartidos en redes sociales muestran escenas de pánico mientras los asistentes al concierto del grupo Piknik huían del lugar, rodeados por una densa nube de humo negro. Además, se reportó el colapso del techo del edificio y una parte del mismo envuelta en llamas, según informó la agencia TASS.
Las imágenes también muestran a tres personas vestidas con ropa de camuflaje irrumpiendo en el lugar y abriendo fuego indiscriminadamente con fusiles automáticos. Otros videos muestran los cuerpos tendidos en el suelo entre charcos de sangre. Aunque los servicios de emergencia no han confirmado la cantidad exacta de atacantes, se considera que podrían ser hasta cinco.
En medio del caos, se ha iniciado la evacuación y evaluación del edificio. Cerca de 100 personas fueron rescatadas a través del subsuelo del lugar, mientras que otro grupo, que se encontraba en el techo, está siendo rescatado por equipos especiales para dicha altura.
Un periodista de la agencia RIA Novosti informó que las personas presentes en la sala fueron instruidas para acostarse en el suelo durante 15 o 20 minutos como medida de protección contra los disparos. Agregó que la evacuación comenzó cuando se consideró que ya no había peligro inmediato.
