El caso mas emblemático es el de «Viviana» una joven madre de 21 años con un tumor en la pelvis que denunció en un video en redes sociales, quien ha sido casi desahuciada según lo que le dijeron los médicos. En su denuncia desesperada, la joven lamenta esa desatención de las autoridades de salud, ya que si hubiera sido atendida hace 8 meses, posiblemente no estaría en esa situación.
El último dato de las obligaciones del estado con prestadores privados de salud, supera los 90 millones de dólares, según la Asociación Nacional de Clínicas y Hospitales Privados del Ecuador. La deuda tendría un atraso desde el 2020. Solo el MSP (Ministerio de Salud Pública) tiene una deuda de 96’298.348 dólares y con los centros y clínicas de diálisis unas 22 instituciones, la deuda sería de unos 43 millones de dólares.
«Afecta a toda la familia, porque ese entorno tiene que buscarse le dinero para pagar el tratamiento de sus familiares, como los de cáncer, insuficiencia renal crónica, o enfermedades graves a niños como la AME atrofia muscular espinal y otras enfermedades raras, cuyos tratamientos son de miles de dólares. Muchos familiares buscan hacer eventos, rifas para pagar estos medicamentos, yo me pregunto cuantas personas con enfermedades catastróficas que no están recibiendo tratamiento, están muriendo. Este gobierno al igual que los anteriores, no le importa la salud de los ecuatorianos y eso se en la inversión menor que la de dos años anteriores que no llega al 4% del PIB», lamentó Diego Jimbo.
En el caso de FUPEC Familias Unidas por las Enfermedades Catastróficas, son decenas de miles de enfermos que no tiene atención en el sistema público de salud, uno de esos es el grupo de de asociación de pacientes con enfermedades raras y catastróficas representan un 65%, advierte Diego Jimbo vocero de este colectivo de familias.
