Las exportaciones no petroleras y no mineras de Ecuador alcanzaron un desempeño histórico en el primer semestre de 2025, con un crecimiento del 22 % en relación al mismo período de 2024. Según cifras oficiales, el país logró ventas externas por USD 12.600 millones, consolidándose como uno de los principales motores de la economía nacional.

Este resultado representa el 67 % de las exportaciones totales, lo que refleja un giro significativo hacia la diversificación productiva y una menor dependencia del petróleo. Al mismo tiempo, la balanza comercial cerró con un superávit de USD 4.166 millones, un incremento del 11,4 % frente al año anterior, lo que constituye el mejor registro semestral de la última década.

Los productos estrella de esta expansión fueron el camarón, el banano, el cacao y sus derivados, así como las flores naturales, todos con crecimientos notables en valor y volumen. En particular, el cacao se benefició de la escasez global y del alza de precios internacionales, lo que impulsó sus ventas a niveles sin precedentes.

Los principales destinos de exportación se concentraron en Estados Unidos, la Unión Europea y China, mercados que absorbieron gran parte de la oferta ecuatoriana. No obstante, expertos advierten que la fuerte concentración en pocos productos y socios comerciales sigue siendo un reto estructural que podría exponer al país a choques externos.

El Gobierno destacó que el dinamismo exportador respalda la estabilidad macroeconómica y genera impacto directo en sectores productivos que sostienen miles de empleos en el país. Sin embargo, la apuesta a futuro será ampliar la canasta exportadora con mayor valor agregado y conquistar nuevos mercados para sostener este ritmo de crecimiento.