Marcela Aguiñaga, prefecta del Guayas, advirtió este martes que el municipio de Guayaquil tiene un plazo de cinco días para retirar la obra ubicada en la avenida del Bombero, luego de que un proceso sancionador detectara irregularidades en el proyecto que afectan la movilidad en la zona. De no cumplirse, la prefectura ejecutará la medida “a cuenta y riesgo”, afirmó la autoridad.

Ante las acusaciones del alcalde de Guayaquil, Aquiles Álvarez, que la señaló de “emperadora” y de arrogarse funciones, la prefecta respondió que su labor se centra en cumplir la ley y garantizar la seguridad vial, y no en entrar en disputas políticas.

En otro orden de ideas, Aguiñaga habló sobre el estado del dragado del río Guayas e indicó que el contrato anterior fue terminado y que se trabaja en un nuevo modelo de licitación que permitirá continuar la obra sin costos excesivos para la provincia. Asimismo, destacó la importancia de priorizar acciones en la red vial y seguridad, más allá de los conflictos políticos.

Sobre su relación con la Revolución Ciudadana, la prefecta reconoció discrepancias con la actual directiva, pero descartó alejarse del movimiento. “No puedo deshacerme de algo que ayudé a construir y en lo que creo desde 2007”, afirmó, subrayando que su enfoque sigue siendo la gestión en favor de los ciudadanos, independientemente de conflictos internos.