El expresidente Rafael Correa pidió disculpas públicas al país por el caso del asambleísta Santiago Díaz, acusado de violación y separado de la bancada de la Revolución Ciudadana. Correa calificó el hecho como “una vergüenza” y pidió que se investigue exhaustivamente, además de expresar solidaridad con la víctima y su familia.

En una entrevista con Punto Noticias, Correa afirmó que Díaz debió permanecer en el país para enfrentar las acusaciones y que este tipo de hechos afectan la imagen del movimiento político. “En una cuestión tan grave uno tiene que dar la cara”, señaló.

El exmandatario también aprovechó para cuestionar duramente al Gobierno de Daniel Noboa por el aumento de la violencia y el colapso económico que atraviesa el país. Señaló que Ecuador, que fue uno de los países más seguros de América Latina durante su administración, enfrenta hoy una crisis sin precedentes con más de 4.600 homicidios en el primer semestre de 2025.

Correa denunció un modelo neoliberal que, según dijo, “destroza al Estado” y criticó la supuesta complicidad del sistema financiero con el lavado de más de 4.000 millones de dólares. Asimismo, alertó sobre el deterioro en el sector energético y petrolero, advirtiendo que la crisis podría ser deliberada para justificar privatizaciones.

El expresidente también se refirió a la crisis eléctrica, el desempleo récord y la caída del ingreso per cápita, que regresó a niveles de hace una década. Pese a la situación y la persecución política, aseguró que la Revolución Ciudadana continúa siendo la principal fuerza política del país.

“Lo más importante es la patria, no el correísmo. Hemos sido un ejemplo para América Latina por diez años de progreso”, enfatizó.