El presidente de la Asamblea Nacional, Niels Olsen, cumplió su advertencia: 40 funcionarios que mantenían lazos familiares entre sí o con asambleístas fueron separados del Legislativo. La noticia se confirmó la noche del martes 15 de julio, acompañada de un mensaje tajante: “Aquí no hay intocables”.

De los separados, 19 presentaron su renuncia voluntaria y 21 fueron desvinculados por vía administrativa. Todos ellos quedaron fuera tras la reforma del artículo 7 del Reglamento de Talento Humano, que cerró la puerta a prácticas de nepotismo dentro de la institución.

Entre los ahora exfuncionarios hay personal relacionado a las bancadas de Revolución Ciudadana – RC (12), Acción Democrática Nacional – ADN (10) y el Partido Social Cristiano – PSC (2). También se detectaron vínculos entre funcionarios administrativos que compartían lazos familiares.

Olsen defendió la medida como el primer paso para sanear una institución históricamente señalada por el nepotismo: “No estamos aquí para ocupar cargos, estamos aquí para honrar a un país transformando esta Asamblea. Las reglas son para todos”.

Por ley, los nombres no se han hecho públicos. El proceso seguirá vigente durante los próximos 30 días, bajo supervisión del Consejo de Administración Legislativa (CAL), garantizando la confidencialidad de la información conforme a la Ley de Protección de Datos.