Con la firme intención de salvar vidas y evitar muertes prevenibles, el Gobierno de Ecuador anunció este miércoles la conformación del Comité Interinstitucional de Salud Materno Neonatal, una iniciativa que busca reducir los índices de mortalidad materna y neonatal en el país.

Aunque hubo una leve mejoría entre 2022 y 2023 —la tasa de mortalidad materna bajó de 41,2 a 35,6 por cada 100 000 nacidos vivos—, las autoridades reconocen que la cifra sigue siendo alarmante. En el caso de la mortalidad neonatal, en 2023 se reportaron 5,8 muertes por cada 1 000 nacimientos, frente a 6,7 en 2022.

“Esto es algo que no debe pasar”, expresó Edgar Lama, presidente del Consejo Directivo del IESS y exministro de Salud, durante el acto de firma de creación del Comité. Según dijo, muchas de estas muertes ocurren por la falta de coordinación y recursos en el sistema de salud.

Un pacto por la vida

El ministro de Salud, Juan Bernardo Sánchez, señaló que el nuevo Comité representará un cambio de enfoque: dejar de hablar de muerte materna y enfocarse en la salud materna. “Hoy marcamos un hito”, aseguró.

El Comité estará compuesto por representantes del Ministerio de Salud, IESS, Policía Nacional, Fuerzas Armadas, ACESS, sociedad civil, universidades y organismos internacionales como la Organización Panamericana de la Salud (OPS).

Sonia Quezada, delegada de la OPS/OMS, fue tajante: “El 90 % de las muertes maternas a nivel mundial son prevenibles. No podemos permitir que mujeres y niños sigan muriendo por causas evitables”.

El Comité definirá y aprobará un Plan Nacional Materno Neonatal, que incluirá estrategias como:

• Fortalecimiento del sistema de vigilancia de mortalidad evitable.
• Despliegue más eficiente de médicos, ambulancias y medicamentos.
• Coordinación interinstitucional para respuestas rápidas.
• Evaluación continua basada en datos técnicos.

“El Estado, junto a la sociedad, se compromete a proteger la vida desde su origen”, afirmó Sánchez.