No podemos dejar de mencionar que una de las mayores preocupaciones de la sociedad ecuatoriana es la inseguridad que ha venido creciendo y expandiéndose a todas las regiones del país, donde debemos reconocer que el gobierno ha desplegado una lucha contra la inseguridad y el narcotráfico debiendo corregir el eslabón más débil que es el sistema judicial en la lucha contra la delincuencia organizada.

Para ello es necesario contar con un respaldo internacional, principalmente de nuestros aliados que son los países desarrollados y afectados por el envío clandestino de droga y que deben ser los primeros interesados en fortalecer la seguridad que permita al Estado ecuatoriano combatir al crimen organizado y el narcotráfico que afectan y seguirán afectando gravemente la estabilidad del país.

Esto implica una modernización del sistema penitenciario y del sistema judicial acompañada de medidas preventivas contra el crimen transnacional, el contrabando fronterizo y marítimo, con todas las afectaciones colaterales de las actividades ilegales que lo acompañan.

Debe incorporarse un fortalecimiento de las normas que promuevan la transparencia en la gestión pública y sanciones de mayor rigor en los actos de corrupción. Para ello es necesario revisar todos los códigos legales a fin de que haya un solo criterio en la normativa; eliminando toda la subjetividad principalmente en las normas inferiores que permiten la interpretación arbitraria de los mandos medios en las distintas instituciones que generan demoras injustificadas en el caso de inversión y ejecución de proyectos que faciliten la creación de nuevos empleos y valor agregado en beneficio del desarrollo del país.

La experiencia de más de 50 años ha demostrado que los actos de omisión no importan a muchos funcionarios; mientras siga recibiendo su sueldo el país puede darse lujo de quedarse sin emprendimientos, sin inversiones significativas y sin la creación de puestos de trabajo tan buscado por la autoridad de turno. Esto obliga a la gente a buscar oportunidades tanto legales como ilegales dentro y fuera del país, cuando lo que más urge en este país es atraer la inversión nacional y extranjera y retener la mano de obra calificada para el desarrollo de agro tan virtuoso y bondadoso, pero mal gestionado igual que múltiples otras actividades.

Lo mismo podemos decir de la infinidad de oportunidades para el desarrollo del turismo en las tres regiones continentales y la región insular del país. No hay otro país más compacto y bio diverso que el Ecuador. Si comparamos el nivel de turismo que llega al Ecuador con el de nuestros vecinos, llegamos a la conclusión que nos morimos de sed junto a la fuente. No por culpa ajena, sino por la propia. Nuevamente, tenemos que volver a mencionar que es por causa de la inseguridad, tanto jurídica como física son temas que deben erradicarse para creación de empleo en estos sectores.

Para seguir hablando de oportunidades, es necesario fijar un norte para el país con objetivos, hitos y metas de mediano y largo plazo que sean independientes del sectarismo partidista y para ello es necesario promover un diálogo entre los sectores políticos, sociales y económicos que permita la construcción de consenso que genere estabilidad política y social tan venida a menos en este último cuarto de siglo.

Finalmente debemos recordar que por múltiples motivos el país no ha podido aprovechar de su condición de país dolarizado que reduce el riesgo cambiario para atraer la inversión a las múltiples oportunidades en el desarrollo de la infraestructura dónde tenemos el ejemplo que las concesiones viales han permitido un viaje con mayor seguridad a cambio del valor del mantenimiento vial adecuado sin pérdida de soberanía.

Lo mismo debe llevarse adelante en el sector energético tanto petrolero como eléctrico que crearía miles de empleos bien renumerados con inversiones que sobrepasan los 50,000 millones USD. Posiblemente los recursos de inversión requeridos en el campo minero y de infraestructura vial y sanitaria lleguen a cifras similares y que generarían empleo y bienestar similares al del cantón El Pangui en todo el país gracias a que su geografía ha sido bendecida con esos recursos mineros necesarios para la transición energética y ambiental que podrían significar otro monto importante que impulsara una transformación integral del país.

Todas estas prioridades deberán adaptarse a necesidades específicas del país y los de desafíos globales cada vez más cambiantes y acelerados, con un enfoque a la inclusión, sostenibilidad y bienestar de los residentes en el país.