El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, lanzó una contundente advertencia a su homólogo ruso, Vladimir Putin, exigiendo el fin inmediato de la guerra en Ucrania, conflicto que ya ha dejado miles de muertos y vastos territorios destruidos desde su inicio en febrero de 2022.
Trump aseguró en su red social Truth Social que, de no lograrse un acuerdo, impondrá “altos niveles de impuestos, aranceles y sanciones” sobre las exportaciones rusas. “¡DETENGA esta ridícula Guerra! Es hora de HACER UN TRATO. NO SE DEBEN PERDER MÁS VIDAS”, escribió, en lo que marca su primera declaración directa sobre el conflicto desde que asumió la presidencia.
Moscú, a través de Dimitri Polyanskiy, embajador adjunto ante la ONU, expresó disposición para escuchar qué tipo de acuerdo propone Trump, pero recordó que las raíces del conflicto van más allá del alto al fuego. “No es simplemente la cuestión de poner fin a la guerra, sino de abordar las causas profundas de la crisis ucraniana”, afirmó Polyanskiy.
El embajador criticó la postura histórica de Estados Unidos, acusando al país de convertir a Ucrania en un “Estado antirruso” y de financiar el conflicto con cientos de miles de millones de dólares en apoyo militar al gobierno de Volodymyr Zelensky.
Putin ha reiterado que solo negociará un acuerdo si se mantienen los actuales territorios ocupados por Rusia, que representan el 20% de Ucrania, y si Ucrania se compromete a la neutralidad geopolítica. Sin embargo, en Moscú han surgido señales de que el Kremlin podría estar preparando el terreno para aceptar un cese al fuego sin alcanzar la victoria prometida.
Analistas destacan declaraciones recientes de Margarita Simonyan, conocida comentarista pro-Putin, quien habló de condiciones “realistas” para finalizar la guerra. Esta postura ha provocado el rechazo de sectores más radicales en Rusia, quienes ven cualquier concesión como una derrota.
Por su parte, Zelensky ha subrayado que cualquier acuerdo de paz deberá incluir una fuerza de paz internacional de al menos 200.000 soldados, con la participación esencial de tropas estadounidenses como elemento disuasorio frente a Rusia. “No puede ser sin Estados Unidos… aunque algunos amigos europeos piensen que puede ser, no lo será”, declaró.
El presidente ucraniano también admitió que, en un eventual acuerdo, podría considerarse ceder temporalmente algunos territorios ocupados por las fuerzas rusas.
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