La exvocal del Consejo de la Judicatura (CJ), Maribel Barreno, inició su testimonio en el juicio por obstrucción de la justicia que enfrenta, defendiendo su postura y acusando a la fiscal general del Estado, Diana Salazar, de ser la responsable de una persecución sistemática en su contra desde 2021. En su declaración, Barreno negó que las acciones por las que se le procesa estén relacionadas con una recusación en otro proceso, y aseguró que su defensa está basada en su rechazo a formar parte de una “estructura de poder devoradora” que, según ella, ha causado temor y caos dentro del sistema judicial ecuatoriano.

Este caso forma parte del juicio por el denominado “Caso Independencia Judicial”, que comenzó el 4 de diciembre de 2024. Barreno es acusada junto a otros diez exfuncionarios del CJ por intervenir en la suspensión y destitución del exmagistrado Walter Macías, con el fin de obstaculizar su participación en el caso penal conocido como “Vocales”, relacionado con tráfico de influencias. Barreno y Wilman Terán, expresidente del CJ, son considerados los autores principales del delito, mientras que los demás acusados figuran como cómplices.

En su testimonio, Barreno también respondió a las acusaciones relacionadas con un encuentro grabado con el exvocal Juan José Morillo y el presidente de la Corte de Pichincha, Vladimir Jhayya, en el que se discutieron acciones legales sobre una acción de protección interpuesta por Guadalupe Llori, presidenta de la Asamblea Nacional. Según la Fiscalía, este encuentro se dio en un edificio privado en Quito, donde se trató de influir sobre un caso judicial que estaba en manos de la Corte Pichincha.

Barreno defendió su gestión como vocal principal del CJ, asegurando que siempre actuó con ética, transparencia y sin presiones políticas. Aclaró que su trabajo nunca estuvo vinculado a afinidades con movimientos políticos o gobiernos de turno, lo que le permitió tomar decisiones sin compromisos ni interferencias externas.

En cuanto a las acusaciones de los testimonios de otros exfuncionarios del CJ, Barreno indicó que fueron dadas bajo presiones de la Fiscalía. También sugirió que la enemistad de Macías hacia ella surgió a raíz de su apoyo a la destitución de su hermano, quien fue removido del cargo de juez en 2023, decisión que Barreno respaldó.

El juicio continúa con la participación de los acusados y sus defensores, quienes seguirán exponiendo sus argumentos frente a los conjueces de la Corte Nacional de Justicia.