El rey Felipe VI de España abrió el debate de la XXIX Cumbre Iberoamericana de Jefas de Estado y Gobierno este viernes 15 de noviembre, celebrada en el Museo Pumapungo de Cuenca, Ecuador.
En su intervención, el monarca resaltó la fuerza de los lazos que unen a los países de Iberoamérica y su capacidad para trabajar juntos en la resolución de desafíos globales.
“Es mucho más lo que nos une que lo que nos separa”, afirmó Felipe VI, subrayando que, a lo largo de casi tres décadas de cumbres iberoamericanas, se han fortalecido las relaciones diplomáticas y de cooperación entre los países miembros.
El rey hizo un llamado a la unidad y la colaboración en temas cruciales como el cambio climático, la sostenibilidad y el desarrollo social.
Felipe VI también expresó su satisfacción por el éxito de la organización de la Cumbre, felicitando al presidente ecuatoriano Daniel Noboa por su esfuerzo en llevar adelante este importante encuentro.
“La cumbre se ha convertido en un espacio de encuentro indispensable para consolidar la fraternidad entre nuestras naciones”, añadió.
El monarca español destacó el impacto de las cumbres en la política social y la cooperación en Iberoamérica, recordando que, a lo largo de los años, estos encuentros han impulsado políticas que han beneficiado a millones de personas en la región.
Con su discurso, Felipe VI reafirmó su compromiso con los principios de cooperación y solidaridad que han guiado las cumbres desde su creación, enfatizando que solo a través de la unidad se podrán afrontar los retos más grandes que enfrenta la región.
0 comentarios