Washington se encuentra en vilo: Donald Trump, presidente electo de Estados Unidos, sorprendió al anunciar que Marco Rubio, el enérgico senador de Florida, será el nuevo secretario de Estado, según fuentes cercanas.

Aunque ninguna de las partes ha confirmado el nombramiento, la elección de Rubio, de ascendencia cubana, abriría un capítulo inédito en la historia de la diplomacia estadounidense al convertirse en el primer latino en asumir este cargo de altísima responsabilidad.

Con un historial de fuertes posturas en política exterior, Rubio, quien ha sido uno de los “halcones” del Senado en temas como China, Irán, y sanciones a Cuba y Venezuela, promete dar un giro pragmático y robusto a las relaciones internacionales de la mano de Trump.

Desde el Senado, Rubio ha defendido con firmeza a Israel y se ha mostrado escéptico sobre la ayuda económica sin restricciones a Ucrania, dejando claro que prefiere que Estados Unidos impulse una “negociación que devuelva el control a Ucrania” en su conflicto con Rusia.

Rubio llega con una misión que no es sencilla: mediar en la compleja guerra entre Rusia y Ucrania y mantener un ojo atento en los conflictos en Gaza y Líbano, donde Trump ya ha asegurado su respaldo a Israel.

Esta designación ocurre mientras otros puestos clave, como el de embajadora ante la ONU y el consejero de Seguridad Nacional, han sido asignados a aliados de Trump, consolidando un equipo de línea dura en la arena global.

Además, el nombramiento de Rubio podría fortalecer el respaldo de la comunidad latina a Trump, un bloque que jugó un rol crucial en su reciente victoria electoral.

El senador, quien en las primarias de 2016 fue el objetivo de los ataques de Trump, parece haber dejado atrás cualquier aspereza del pasado, transformándose en un aliado clave. Su lealtad, demostrada durante la reciente campaña presidencial, le ha dado ahora un lugar de máxima influencia en la administración.

De confirmarse la designación, Rubio será la pieza clave en un escenario geopolítico que exige decisiones complejas y estrategias firmes.