Octavio Paz lo resumió en una frase poderosa: “El culto a la vida, si de verdad es profundo y total, es también culto a la muerte”.
Y en México, esta idea se convierte en celebración cada Día de Muertos, cuando la vida y la muerte se abrazan en un ritual de fiesta, luz y tradición.
Esta festividad, que marca la identidad de los mexicanos, transforma el recuerdo de los fallecidos en un encuentro lleno de color y simbolismo, reseña BBC Mundo.
Lejos de las connotaciones de duelo que esta fecha tiene en otras culturas, el Día de Muertos en México es motivo de júbilo.
Altares con flores de cempasúchil, alimentos, velas, y fotos de seres queridos llenan los hogares para recibir a las almas que, según la creencia, regresan a visitar a sus familiares.
Gabriela Luna, una joven de Ciudad de México, asumió esta tradición familiar en honor a su abuela fallecida, quien le enseñó el ritual del altar, que ahora mantiene vivo con cariño.
Esta práctica no solo es un acto de memoria, sino una herencia mesoamericana que data de hace miles de años, cuando los pueblos indígenas realizaban ceremonias para guiar a sus muertos hacia el Mictlán, el inframundo mexica.
A su llegada, los españoles mezclaron estas tradiciones con las festividades católicas, consolidando una fusión cultural que sigue viva en la actualidad.
Durante la Revolución Mexicana, este día ganó un carácter nacionalista, convirtiéndose en una de las celebraciones más importantes del país.
A día de hoy, sigue siendo motivo de asombro y fascinación para el mundo, especialmente tras el éxito de la película Coco, que capturó el corazón de millones y llevó esta tradición a nuevas audiencias.
Sin embargo, como explica el antropólogo Andrés Medina, esta no es solo una fiesta alegre, sino un momento solemne en el que los mexicanos honran la memoria y mantienen vivo el vínculo con quienes ya no están.
El Día de Muertos es, entonces, un recordatorio de la identidad, del sentido de pertenencia y de los lazos inquebrantables que se tejen más allá de la vida y la muerte.
0 comentarios