El embalse de la hidroeléctrica Mazar ha registrado una preocupante disminución de dos metros desde el jueves 3 de octubre, alcanzando un nivel de 2 117,8 metros sobre el nivel del mar este domingo, 6 de octubre de 2024. Esta reducción obedece a dos factores principales: la falta de lluvias intensas en el Austro y la reanudación de las operaciones en la casa de máquinas de la central.

Las lluvias, que se habían manifestado de manera esporádica el fin de semana anterior en la zona de Cuenca, desaparecieron nuevamente, ocasionando que los caudales de los ríos Tomebamba, Yanuncay, Machángara y Tarqui desciendan a niveles considerados bajos. De igual manera, los ríos Santa Barbará, San Francisco, Burgay y Paute, que también alimentan a Mazar, no han mostrado una mejora significativa en su aporte.

En tan solo tres días, el caudal promedio que recibe el embalse Mazar pasó de 26,26 a 14,79 m³/s, cuando en días anteriores había alcanzado los 43,08 m³/s, según reportes de la Corporación Eléctrica del Ecuador (Celec Sur).

Otro factor que ha contribuido a esta caída fue la reactivación de las dos turbinas en la casa de máquinas de Mazar el 4 de octubre, tras una suspensión temporal de operaciones entre el 28 y 29 de septiembre. Durante esos días, la producción fue mínima, pero desde su reinicio la central ha generado entre 1 754,68 a 1 922,92 megavatios/hora.

El embalse de Mazar, con una capacidad para almacenar 410 millones de metros cúbicos de agua, es la principal fuente de alimentación de la represa de Amaluza, que a su vez forma parte de la central hidroeléctrica Paute, ubicada aguas abajo.

Las condiciones en Paute, la segunda mayor fuente de generación eléctrica de Ecuador después de Coca Codo Sinclair, también se han visto comprometidas. La cota de la presa de Amaluza se redujo de los 1 985,82 a 1 983,79 metros en los últimos días. Aunque la diferencia parece pequeña, esta reserva es vital para mantener el flujo de energía estable, dado que su capacidad de almacenamiento es de apenas 120 millones de metros cúbicos, en comparación con Mazar.

En respuesta, Paute incrementó su producción para suplir la demanda nacional, generando 16 489 y 12 786 megavatios/hora el 4 y 5 de octubre respectivamente, en contraste con los niveles previos de 2 729 y 3 346 megavatios/hora.

Según el Operador Nacional de Electricidad (Cenace), este domingo el 61% de la demanda energética del país será cubierta por la generación hidroeléctrica. Coca Codo Sinclair aportará con el 29%, Paute con el 17%, Sopladora con el 11% y Mazar con el 4%.

Mientras el país enfrenta desafíos en la gestión de sus fuentes hídricas, la estabilidad del sistema eléctrico sigue dependiendo de las condiciones climáticas, poniendo en evidencia la necesidad de diversificar y optimizar el uso de los recursos energéticos disponibles.