La mañana de este miércoles 2 de octubre, dos jóvenes fueron hallados muertos dentro de una furgoneta estacionada en la calle Junín, en el centro de Guayaquil. Según la primera hipótesis de las autoridades, las víctimas habrían inhalado monóxido de carbono, lo que les provocó la muerte.

El vehículo tenía las ventanas cerradas y, en un primer momento, daba la impresión de que ambos jóvenes estaban dormidos. Sin embargo, cuando los transeúntes se acercaron para golpear las ventanas, notaron que no reaccionaban y alertaron a las autoridades. Al lugar llegaron unidades del Cuerpo de Bomberos y agentes de Criminalística, quienes confirmaron el deceso y realizaron el levantamiento de los cuerpos.

Deportan a 14 vietnamitas que ingresaron a Ecuador por lugares no autorizados

Junto a la furgoneta, se encontraba un generador de energía eléctrica conectado a un edificio de la zona, utilizado para mitigar los cortes de luz que han afectado a la ciudad en los últimos días. Este dispositivo sería la fuente del monóxido de carbono que habría penetrado en el interior del vehículo, causando la intoxicación de los jóvenes.

El monóxido de carbono es un gas altamente peligroso que no se puede ver ni oler, pero que, en concentraciones elevadas, puede ser letal en pocos minutos. Las autoridades han advertido sobre el riesgo de utilizar generadores en espacios cerrados o mal ventilados, especialmente en momentos de emergencia como los actuales cortes de energía.

La policía y el Cuerpo de Bomberos de Guayaquil están llevando a cabo las investigaciones para determinar las circunstancias exactas de la tragedia. Por el momento, las autoridades no han revelado las identidades de las víctimas ni otros detalles adicionales. Se espera que en las próximas horas se realicen las autopsias correspondientes para confirmar la causa de muerte.