La provincia de Carchi se encuentra consternada tras el asesinato de Kerly, una joven de 16 años cuyo cuerpo fue hallado con signos de violencia en la parroquia Julio Andrade el 27 de septiembre de 2024. La adolescente, quien estaba embarazada, fue reportada como desaparecida dos días antes de su trágico hallazgo.

Kerly había salido de su hogar para encontrarse con su pareja sentimental, también menor de edad, pero nunca regresó. Tras días de intensa búsqueda, su cadáver fue encontrado en medio de la maleza, con evidentes signos de agresión física. La familia de la joven exige justicia y clama para que el caso no quede en la impunidad.

Marcelo Ayala, padre de la adolescente, expresó su dolor a Teleamazonas: “No es solo una vida, son dos”, refiriéndose al estado de embarazo de su hija. José Puenayán, tío de la víctima, hizo un llamado desesperado a las autoridades: “Quisiera que pongan mano dura en esto para que no quede en la impunidad”. Por su parte, Lady Ayala, hermana de Kerly, señaló que el cuerpo de la joven “estaba bien maltratado” y presentaba signos de asfixia, con moretones en su rostro y cuerpo.

El funeral de la adolescente se llevó a cabo el 30 de septiembre en la institución educativa donde cursaba sus estudios. Familiares, amigos y vecinos se congregaron para despedir a Kerly, al tiempo que reiteraban la necesidad de que se haga justicia para que este crimen no quede en el olvido.

El caso está siendo investigado como un presunto femicidio. La Fiscalía ha anunciado que se aplicará el Protocolo Nacional para Investigar Femicidios y otras Muertes Violentas de Mujeres y Niñas, una herramienta diseñada para garantizar una recolección exhaustiva de pruebas y elementos de convicción. Este protocolo tiene como objetivo asegurar una reparación integral para las familias de las víctimas y que los responsables enfrenten todo el peso de la ley.

El brutal asesinato de Kerly ha reavivado la urgencia de combatir la violencia de género en Ecuador, un país que sigue luchando por erradicar el femicidio y proteger a sus mujeres y niñas.