La semana pasada, se acusó falsamente a Sebastián Barreiro Abad, hijo de la vicepresidenta de la República, Verónica Abad, de poseer cuentas millonarias en paraísos fiscales, afirmó su abogado defensor, Oswaldo Trujillo. 

En una entrevista con Fabricio Vela, director del programa Primera Plana, y Belkis Sánchez, Trujillo explicó que es necesario entender el contexto en el que surgió este bulo y el ambiente de odio que lo precedió. 

“El día que Janeth Hinostroza publicó la información en la red X coincidió con la audiencia de acción de protección que había planteado la vicepresidenta contra la ministra de Trabajo”, señaló Trujillo. 

De esta manera, la atención pública se desvió hacia el hijo de la vicepresidenta, acusándolo de tener siete millones de dólares que debía justificar, lo que provocó una fuerte conmoción social. “Sebastián Barreiro me ha asegurado que no tiene activos, cuentas ni firmas bancarias en ninguna parte del mundo, ni en paraísos fiscales”, afirmó el abogado. 

Para esclarecer los hechos, la defensa ha solicitado a la Fiscalía una asistencia penal internacional. 

Janeth Hinostroza difunde información falsa 

Trujillo afirmó que los documentos presentados por la periodista Janeth Hinostroza en su cuenta de X fueron fabricados con la intención de generar malestar social.  

El jurista recordó que, al preguntarle al ministro de Gobierno sobre cómo obtuvieron la información, éste respondió que provino de una fuente anónima. Sin embargo, Trujillo cuestionó que el Gobierno no haya verificado la información antes de entregarla a la periodista, quien posteriormente la difundió en sus redes sociales. 

“La pregunta crucial es, ¿quién recibió la información anónima primero: la periodista o el Gobierno? Al final, el único beneficiado de esta conmoción social es el propio Gobierno”, concluyó Trujillo. 

Carlos Vera y la incitación al odio 

El abogado también mencionó al periodista Carlos Vera, quien no solo replicó la información falsa, sino que agravó la situación al llamar a Sebastián Barreiro “muerto de hambre”, provocando una ola de odio en su contra.