El sureste de Estados Unidos se encuentra en máxima alerta por la inminente llegada de la tormenta tropical Helene, que se fortalece rápidamente a medida que avanza por el Caribe.

Con vientos sostenidos de 85 km/h, se espera que Helene se convierta en un poderoso huracán de categoría 3 antes de golpear el noroeste de Florida este jueves, según el Centro Nacional de Huracanes (NHC).

El paso de Helene por las aguas calientes del Golfo de México acelerará su transformación, lo que ha llevado a los gobiernos de Florida y Georgia a declarar estado de emergencia.

El gobernador de Florida, Ron DeSantis, alertó sobre el riesgo de marejadas ciclónicas mortales, con olas que podrían alcanzar hasta 4,6 metros.

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Más de 10 condados en la costa del Golfo ya han emitido órdenes de evacuación parcial, y se espera que el número aumente a medida que el huracán se acerque.

El NHC también ha emitido alertas para las comunidades de Yucatán (México) y Pinar del Río (Cuba), donde las lluvias torrenciales y los vientos destructivos podrían causar inundaciones y deslizamientos de tierra.

Esta tormenta recuerda el devastador impacto de Idalia, el huracán que arrasó el noroeste de Florida en agosto de 2023.

Ante la amenaza, los residentes del sureste están siendo instados a prepararse para lo peor, ya que Helene podría dejar a su paso una estela de devastación, inundaciones y daños significativos.

Los expertos advierten que las próximas horas serán cruciales, ya que Helene continúa ganando fuerza, representando un peligro inminente para millones de personas.