El magnesio, mineral esencial para la salud, ha ganado atención recientemente por sus múltiples beneficios. Se encuentra en alimentos como verduras de hoja verde, frutos secos, semillas, legumbres y cereales integrales, y también está disponible en suplementos como el citrato de magnesio.

El citrato de magnesio se ha asociado con mejoras en la función muscular, alivio de dolores de cabeza y aumento de la producción de energía. Sin embargo, su uso puede conllevar efectos secundarios, como diarrea, calambres abdominales y deshidratación, especialmente si se consume en dosis excesivas. Por ello, es crucial consultar a un médico antes de iniciar cualquier suplementación.

Un estudio reciente publicado en Nutrition Reviews y compartido por la experta en nutrición Isabel Viña en Instagram, revela que un mayor consumo de magnesio está vinculado a un 34% menor riesgo de depresión. El metaanálisis, que incluyó datos de aproximadamente 64.000 personas, sugiere que cada aumento de 100 mg diarios de magnesio elemental puede reducir el riesgo de depresión en un 7%.

A pesar de estos beneficios, Viña advierte que un consumo excesivo de magnesio no es la solución definitiva para prevenir la depresión. Moderación y asesoría médica siguen siendo clave para evitar efectos adversos y lograr un equilibrio saludable.