Carolina Moreno es abogada. Ha sido funcionaria municipal, coordinadora jurídica, asesora legislativa y ministerial.  Puedes encontrar más artículos en ecuadorenvivo.com/opinion/

El Ecuador atraviesa una profunda crisis de desconfianza en sus instituciones, no solamente sucede con el Gobierno Central, Policía Nacional, Servicio de Rehabilitación u otros, sino que lo sentimos de manera más cercana por la falta de servicios eficientes que brindan nuestros Gobierno Autónomos Descentralizados.

En la ciudad de Quito vivimos con una ejecución presupuestaria a mayo del 2024, del 19,80% [1] de ejecución, valor que corresponde al $164.443.381 de $830’522.230, es decir no han ejecutado ni la mitad de lo que se había planificado para el presente año.

A veces cuando observamos estos porcentajes decimos ¿Y a mí en qué me afecta eso?, pues eso es lo más importante, la baja ejecución presupuestaria quiere decir que las instituciones municipales no están haciendo su trabajo, por eso no tenemos servicios de calidad en la ciudad y si usted va en bus o auto ya se debe haber caído en un bache, o tal vez ya se dio cuenta que antes teníamos camiones recolectores de basura pero ahora son camionetas; ahí está la razón de por qué debemos estar más indignados que los hijos del yugo con la poca eficiencia del Alcalde y sus autoridades.

Pero todo esto sucede mientras ustedes y yo bailamos al son de los artistas que cortesía de los municipios nos traen para cualquier fiesta, porque eso sí, no serán buenos administradores, pero si excelentes productores de eventos.

Pabel Muñoz se gastó USD 279.000 trayendo a los Ángeles Azules – pero en Calacalí no hay agua.

En cambio, en Machala el Alcalde Darío Macas utilizó USD 2.5 millones para traer a Maluma, Gilberto Santa Rosa; mientras su ciudad registra una tasa de homicidios del 78,02%.

Pero estos escándalos pasan desapercibidos porque entre tanta información que consumimos la indignación se vuelve líquida y un escándalo tapa al anterior.

Es imposible y se convierte en un deber ciudadano criticar activamente a nuestros Alcaldes, Presidentes de Juntas parroquiales y en general a todo aquel que administra el dinero como si fuera el propio, distribuyéndolo sin planificación, responsabilidad y coherencia y exigirle que cumpla de manera diligente el cargo para el cual ha sido elegido.

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[1] https://www.primicias.ec/noticias/quito/municipio-presupuesto-obras-inversion/