El 28 de julio de 2024, los venezolanos acudirán a las urnas en unas elecciones que prometen ser decisivas después de 25 años de dominio chavista. Nicolás Maduro, el actual presidente y líder del chavismo, enfrenta una creciente presión y desgaste, reflejado en las encuestas que indican un declive en su apoyo. En contraste, la oposición, liderada por Edmundo González Urrutia, se muestra esperanzada en capitalizar el ambiente de cambio que se percibe en el país.

María Corina Machado, la figura más influyente de la oposición, no podrá participar directamente en las elecciones debido a una inhabilitación por parte de la autoridad electoral. Sin embargo, su impacto en la campaña y su influencia siguen siendo significativos, apoyando indirectamente la candidatura antichavista.

A nivel internacional, se están realizando esfuerzos para asegurar que todos los actores políticos se comprometan a respetar el resultado electoral. El ambiente en Venezuela es de alta tensión, con Jorge Rodríguez, una figura clave del chavismo, mostrando confianza en la victoria de Maduro. Mientras tanto, María Corina Machado ha manifestado su disposición para una “transición pacífica” en caso de ser necesario. La consultora Clear Path Strategies ha publicado un estudio que muestra una ventaja de 26 puntos para González sobre Maduro.

Declaraciones sobre el proceso electoral

Enrique Márquez, candidato presidencial por el partido Centrados, acusó a Nicolás Maduro de utilizar amenazas de violencia para intimidar a los votantes, afirmando que el presidente está “desesperado” debido a los resultados desfavorables en las encuestas.

El Gobierno venezolano también ha comunicado que no permitirá la entrada de una delegación del Senado español para observar las elecciones, ya que no han recibido una invitación formal para ello. En una nota verbal, la Embajada venezolana en Madrid informó que el Programa de Acompañamiento Electoral del Consejo Nacional Electoral no incluye una misión de veeduría internacional del Senado español. Esto también afectaría a los cuatro diputados del Partido Popular (PP) que estaban planeando asistir a la invitación de la oposición.

Por otro lado, Edmundo González Urrutia agradeció al presidente brasileño, Luiz Inácio Lula Da Silva, y al exministro de Relaciones Exteriores, Celso Amorim, por su apoyo y observación del proceso electoral. González destacó que “el mundo nos observa y acompaña”, subrayando el interés internacional en el desarrollo de las elecciones.