Vladimir Porojnia, abogado defensor del mayor Santiago Quintanilla, uno de los cuatro oficiales investigados por la muerte de la subteniente Aidita Pamela Ati, defendió la inocencia de su cliente y proporcionó detalles sobre los eventos de la noche del 28 de junio en el fuerte militar Napo.

Porojnia comenzó expresando su solidaridad con la familia de la subteniente Ati, reconociendo la gravedad del caso. Describió que la noche de los hechos hubo un evento en el fuerte militar, donde se consumieron bebidas alcohólicas. El mayor Quintanilla, que trabajaba en un presupuesto, se enteró del festejo y se dirigió al sitio, encontrando a la subteniente Ati en un estado grave debido al alcohol. Es así como, junto con otros oficiales, dispuso que todos se retiraran y llevaron a la subteniente a su habitación, donde le ayudaron a acostarse, aseguró el abogado.

Ante ello, confirma que su defendido sí ingresó al dormitorio de la subteniente Ati, pero dice que solo estuvieron en el lugar por unos cuatro o cinco minutos. Posteriormente, regresaron al evento y continuaron ayudando a otros compañeros que también estaban en estado de embriaguez.

Subteniente participó en un festejo de despedida a dos oficiales antes de ser asesinada; habían 18 personas

El abogado subrayó que el informe de la autopsia preliminar indica que la muerte de la subteniente Ati fue violenta, pero insistió en que Quintanilla no estuvo involucrado en el asesinato. Indicó que se debe esperar el informe final para determinar el tiempo y las circunstancias exactas de la muerte, así como las lesiones encontradas.

Respecto a las críticas sobre la versión inicial de las Fuerzas Armadas, que atribuía la muerte de Ati a una asfixia accidental por vómito, reconoció que el comunicado pudo haber sido apresurado, pero señaló que posteriormente se comprometieron a colaborar con la investigación.

En cuanto a la posibilidad de que los oficiales investigados huyan, Porojnia aseguró que su cliente ha colaborado voluntariamente con la investigación y se ha presentado a las citaciones judiciales. Destacó que la prisión preventiva no es la regla general según la Constitución ecuatoriana y que existen suficientes arraigos sociales, familiares y laborales para garantizar que Quintanilla no evadirá el proceso.

Finalmente, el abogado reiteró la importancia de una investigación exhaustiva y justa, afirmando su confianza en la inocencia de su defendido.