En una reciente entrevista con NotiMundo Estelar, el contralor general del Estado, Mauricio Torres Maldonado, expuso una serie de irregularidades descubiertas en la Contraloría luego de una auditoría interna. Torres destacó que se encontraron prácticas indebidas que abarcan desde servidores que colaboraban con estudios jurídicos para su beneficio hasta la manipulación de informes caducados para favorecer a terceros.

Torres afirmó que “existían estructuras para delinquir dentro de la Contraloría,” subrayando que alrededor de 3,000 informes caducados han resultado en “cientos de millones de dólares” en perjuicio para el Estado.

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Actualmente, 26 servidores de la Contraloría están bajo investigación de la Fiscalía General del Estado, y 38 enfrentan procesos disciplinarios internos. De estos, entre 8 y 10 todavía permanecen en funciones, lo cual es motivo de preocupación.

Además, Torres denunció la existencia de un grupo de auditores que “extorsionaban” y “vacunaban” a terceros, exigiendo pagos de entre USD 5,000 y USD 10,000 para modificar informes. Los delitos identificados incluyen tráfico de influencias y peculado.

El contralor general expresó su compromiso de “sanear” la institución durante su gestión, afirmando que la Contraloría había sido utilizada como una herramienta de persecución en el pasado. Su objetivo es restaurar la integridad y la confianza en esta entidad clave para la transparencia y la rendición de cuentas en el país.