La asambleísta Gisella Molina, integrante de la Comisión de Gobiernos Autónomos, expresó su preocupación por el otorgamiento del permiso ambiental para la obra inmobiliaria de la empresa Vinazin, en Olón – Santa Elena. Señaló que este caso no es simplemente un asunto privado, sino que tiene implicaciones públicas y éticas significativas.
Molina destacó que el permiso ambiental fue otorgado en un tiempo sorprendentemente corto de solo 9 días, lo que genera sospechas sobre posibles manipulaciones y tráfico de influencias. Además, enfatizó que este no es un caso aislado, sino que refleja preocupaciones más amplias sobre la transparencia y la imparcialidad en el gobierno.
Ante ello, la legisladora no descartó la posibilidad de que se pueda censurar y destituir a la ministra de Ambiente, instando a revisar cuidadosamente los procesos parlamentarios y evitar alianzas políticas que busquen la impunidad.
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