A pesar de mantener un perfil bajo desde que anunció su batalla contra el cáncer a principios de este año, el Rey británico, Carlos III, sigue desempeñando un papel activo en el manejo de los asuntos de la corona real. Recientemente, ha autorizado la apertura de una sala hasta ahora inaccesible en el Palacio de Buckingham, demostrando su compromiso continuo con la transparencia y la accesibilidad.

La nueva área, ubicada en el ala este del icónico edificio, ha sido designada para la visita pública. Destacando por su esplendor arquitectónico y decorativo, este espacio no solo ofrece una mirada privilegiada a la majestuosidad del palacio, sino que también desvela un lugar de importancia histórica: la sala donde la familia real británica se reúne antes de aparecer en el famoso balcón desde el que saludan a la multitud desde 1851.

Los boletos para esta experiencia única ya están disponibles para su compra en la página web de la Royal Collection Trust. Por un precio de 75 libras esterlinas (87,5 euros), los visitantes tendrán la oportunidad de explorar las lujosas salas de estilo chinesco, adornadas con muebles clásicos y obras maestras de la colección real.

El recorrido guiado, que incluye el Salón Amarillo, el pasillo principal y el Salón Central, culmina con la vista del balcón real, aunque, por razones de seguridad y conservación, no se permite el acceso directo a este. Sin embargo, los visitantes podrán asomarse a través de las ventanas y disfrutar de las mismas vistas panorámicas que han cautivado a generaciones de monarcas británicos.

Después del recorrido, los visitantes podrán explorar los salones de Estado por su cuenta, seguido de una visita a la cafetería y la tienda del jardín del palacio para llevar consigo un recuerdo de esta experiencia única.