Que exista el consentimiento expreso de un privado de libertad de querer regresar a su país de orígen, que cuente con una pena superior a seis meses y que exista sentencia ejecutoriada, son algunos de los condicionamientos que se establecen para la repatriación de reos a sus países. Así lo manifestó este jueves el exvicecanciller Marcelo Fernández de Córdova, al indicar que hay otros requisitos que son de edad, de enfermedades, entre otros.

El diplómatico dice que una negociación directa entre las naciones es otra de las soluciones. Y es que Ecuador debe cumplir con las normas internacionales a las que está suscrito, como el Convenio de Estrasburgo o un tratado con Colombia, que impiden el traslado directo de los privados de libertad.

Ante ello, explica que la única forma de que una persona extranjera pueda ser enviada de manera unilateral a su país de origen, es que no haya cometido ningún delito y/o su ingreso se haya dado de manera irregular.

Sobre el planteamiento del presidente Daniel Noboa de dejar a los presos en la frontera y que el país receptor vea qué hace con ellos, Fernández de Córdova dice que no es viable, ya que esta acción solo aplica a quien haya ingresado ilegal. En tanto, el exvicecanciller destacó la importancia de alcanzar acuerdos con los países de origen, proponiendo incluso la posibilidad de un intercambio de presos, como ya ha sido planteado por Perú.