De acuerdo con expertos consultados, aunque no podemos detener el paso del tiempo, sí podemos mitigar sus impactos en nuestro cuerpo adoptando hábitos más saludables en áreas bajo nuestro control y deshaciéndonos de conductas perjudiciales.

“Una de las principales características del envejecimiento es el daño celular acumulado que conduce a la disfunción de los órganos y, en última instancia, a la muerte”, comentó el doctor Brett Osborn, neurólogo de Florida y experto en longevidad de Senolytix, a Fox News Digital. “La clave para mantenerse saludable es minimizar el daño celular al no arrojar aceleradores al fuego, que desafortunadamente es lo que hacen la mayoría de los estadounidenses”, continuó.

Los expertos proporcionaron una lista de los ocho comportamientos poco saludables más frecuentes que aceleran el proceso de envejecimiento, junto con sugerencias sobre cómo prevenirlos.

1. Fumar: Se ha comprobado que el hábito de fumar reduce la esperanza de vida. Según investigadores de Action on Smoking and Health del Reino Unido, un fumador de 30 años puede esperar vivir aproximadamente 35 años menos que un no fumador.

2. Exceso de exposición al sol: Una prolongada exposición al sol puede dañar el material genético de la piel, causando arrugas, flacidez cutánea y manchas oscuras, así como aumentando el riesgo de cáncer de piel.

3. Mala alimentación: Las dietas carentes de nutrientes pueden provocar inflamación y daño por radicales libres, acelerando el proceso de envejecimiento. Se recomienda seguir una dieta balanceada que incluya frutas, verduras, proteínas magras y grasas saludables.

4. Falta de ejercicio: La falta de actividad física contribuye a la pérdida de masa muscular, disminución de la densidad ósea y aumento de peso, además de problemas cardiovasculares. Se enfatiza la importancia del ejercicio regular para mantener la salud.

5. Consumo excesivo de alcohol: El alcohol puede deshidratar la piel, causar daño hepático y deterioro cognitivo, así como acelerar el proceso de envejecimiento.