Una explicación detallada sobre los fenómenos astrofísicos no fue suficiente para eclipsar el impasse diplomático entre Ecuador y México. El 4 de abril, el presidente Daniel Noboa declaró «persona non grata» a la embajadora de México en Ecuador, Raquel Serur, desencadenando una serie de acontecimientos que captaron la atención internacional.
Durante su conferencia de prensa habitual, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, invitó a expertos del Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías para discutir cómo se producen los eclipses solares, en preparación para el evento astronómico que ocurriría el 8 de abril. Sin embargo, el tema del eclipse se vio opacado por las preguntas sobre supuestos casos de corrupción en el sistema judicial mexicano.
En un giro inesperado, López Obrador anunció minutos después que México consideraría otorgar asilo político al exvicepresidente ecuatoriano Jorge Glas, actualmente refugiado en la embajada mexicana en Quito desde diciembre de 2023 para evadir una orden de detención por el caso Reconstrucción de Manabí.
«Nuestro gobierno no romperá relaciones ni tomará medidas similares con el embajador de Ecuador», señaló López Obrador, vinculando la reacción de Ecuador con la protección que México brinda a Glas. El presidente mexicano confirmó que su gobierno está evaluando la posibilidad de traer a Glas a México, recordando la política exterior mexicana de proteger a los perseguidos y ofrecer asilo.
López Obrador pidió respeto a la soberanía de México en su embajada para evitar cualquier intento de allanamiento, criticando la presencia policial excesiva afuera de las instalaciones diplomáticas. «Es bastante publicitario el uso de la fuerza rodeando la embajada con mucha prepotencia, pero así son los fachos», expresó López Obrador, refiriéndose a las autoridades ecuatorianas.
